En 2023, tras tres años de observación, mediciones, cuidados y aprendizaje del jardín vertical llegó el momento de retirarlo de la fachada, ya que el exterior del edificio iba a ser restaurado en su totalidad.
En convenio con la asociación, y tras un proceso asambleario, se decidió colocar las masharabiyas en el patio mientras pensábamos nuevas alternativas. Esta decisión fue una oportunidad para acercar el jardín a los niños y niñas de la AES Candelaria, y que tomaran la responsabilidad de su riego con el agua recolectada de cinco máquinas de A.Ac.
Una toma de tierra que tenía varias justificaciones y objetivos. En primer lugar, las masharabiyas habían sido diseñadas para un año sin embargo se encuentran en perfecto estado para continuar con su vida útil por lo que nos permiten seguir propiciando nuevos aprendizajes y exploraciones con la comunidad educativa en un patio de juegos escaso en vegetación.
Así mismo, la bajada del jardín da un margen de espera para la búsqueda de nueva financiación que permita la germinación de nuevos experimentos a tratar en próximas ediciones de talleres.